Si lo que quieres es descansar, relajarte, estar cómodo y puedes pagar los 240 dólares (4,000 pesos mexicanos) por noche que cuesta su habitación, supuestamente “Premium”, te sugiero buscar otras opciones.
Los restaurante del Quinta Bella son los mejores de la región, te sugiero que reserves con tiempo porque se llenan. Pero ni se te ocurra quedarte ahí si se trata de consentirte.
La habitación “Premium” no tiene buroes, clóset, mesita para un café, mueblecito para la maleta ni suficientes contactos para dos celulares. La ropa de cama y toallas están percudidas, el cristal que ve al mar asqueroso y el baño es un horno que constantemente huele a cochambre. El aire acondicionado no enfría suficiente, solo hay una triste sillita, terminas poniendo casi todo en el suelo ya que el pequeño librerito que hay ya está lleno con la cafetera y la caja de seguridad. La tina sucia y … ¡junto a la puerta de entrada!
Pero eso no es lo peor, no te avisan que están en obra y que buena parte de la mañana pasan albañiles constantemente por la alberca. Atención, no hay zonas sociales sombreadas donde puedas sencillamente estar sin consumir nada, forzosamente debes entrar a alguno de los restaurantes y consumir.
Considera también que en las noches hay show de 7:30 a 10:00 pm con música estridente que se escucha particularmente fuerte en la habitación Premium.
Muy mala experiencia, hay hoteles superiores por el mismo precio. Preferimos irnos de ahí dos noches antes. Imposible descansar.