De los hoteles que visite en mi tour por Europa, fue el peor, dejó mucho que desear, calor en las habitaciones, no tienen buen sistema de ventilación, su método para ventilar era “abrir la ventana” y al abrirla no hay privacidad topas con las ventanas de todos los demás cuartos. No pusieron vasos para beber agua, ni botellas de cortesía, ni café. Para llegar a nuestra habitación con maletas pesadas tuvimos que bajar unos escalones, desde recepción debieron asignarnos una de fácil acceso. Aparte el espacio es muy angosto, lo único agradable fue el espacio de la regadera y el baño. Pero no volvería a quedarme en ese hotel.