Hemos pasado una buena estancia en el hotel Vila de Caldes.
La habitacion doble era super, muy grande y el cuarto de bano tambien, limpio y acogedor.
El servicio no es el mas rapido pero son amables, la parte mas importante es el SPA.
Habiamos venido a Caldes para el SPA y, aun que nos ha salido bastante caro, nos ha gustado.
El circuito es bastante pequeno, solo 5 salas y 3 son jacuzzi asi que no hay mucha variedad, los masajes bien, caros tambien pero bien hechos.
El hotel esta en el centro del pueblo, de ahi puedes ir andando en todas las partes que vale la pena visitar.
Experiencia positiva